Disculpa lo intensa y romántica.

Disculpa lo intensa y romántica pero no sé ser de otra forma.

A la vida agradezco los poemas de Neruda, las arepas de mi madre,  la forma de ver la vida de mi hermana, el temple irreprochable de mi señor padre. Los avances en relaciones personales, la variedad de amistades, lo bueno de lo malo y el sarcasmo de algunos, mal llamados, regulares.  A la vida agradezco las letras, el universo, el café y su sabor extenso.  La diversión de mis sobrinos, el sol de la mañana, la brisa que entra por la ventana y el pajarito que se detiene en el ocaso de mis sueños.  Haber conocido a personas que ya se fueron, otras que aún permanecen, el blues, el Jazz, la salsa, y el merengue que pido a veces.  Lo acontecido de mis días, lo apresurado de los besos, el calmado de las tardes y el orgasmo que logro cuando duermo.  Sí agradecida completamente, cada cosa que pasa lo disfruto, con sustos en el pecho, con algo de temor en el alma pero siempre dispuesta a dejar el corazón en batalla.   —Milce Jiménez Ibarra.  Un fragmento de "Disculpa lo intensa y romántica pero no sé ser de otra forma".  ©Pluma&Café.  ☕